Instrucciones no necesitadas

Cuando la mañana no te sea suficiente

 

Cuando despiertes con esa jaqueca de salir a buscar amor, y regreses únicamente con las piernas cansadas, yo te juro que no habrá necesidad ni de pensar en porque lo sigues haciendo, ¿te acuerdas que alguna vez te dije que la maldad se hace por el gusto y ya?

Entonces ya para que darte instrucciones si has de ignorarlas, pero es preciso que así sea, si no fuese así dejarías de ser tú, y tus piernas delgadas ya no te han de llevar a todos lados donde habrías querido.

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Además siempre tendrás tu trago en la mano y el ánimo de comenzar tu día sabiendo que por la noche te vendrá el sufrimiento. Cuando esto te pase recuerda, respirar un poco más de lo usual y mandar a la mierda todo por un día.

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Pero te pasaran los años y con lo astuta que eres, iras adoptando maneras, maneras que te harán sonreír, como cuando éramos capaz de reírnos y burlarnos de los demás, inténtalo sola, seguro estoy que te saldrá mejor a ti que a mí.

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El único problema que le veo es que siento que he perdido mi pie izquierdo, y no sé si vaya a tener la fuerza de encontrarte, seguirte o perseguir a nadie más, pero te juro que te va a seguir ese pie algunas veces donde vayas para trazarte un camino o simplemente tendrá una obsesión tan grande y tan jodida de seguirte los pasos que ahora que se apartó de mí, piensa por cuenta propia y decide a libre albedrío a diestra y siniestra, está bien es solo un pie, carajo, mejor no hablemos del alma.